jueves, 23 de junio de 2016

ESTUDIANDO LA METAMORFOSIS

Los últimos dos meses del curso tuvimos unos acompañantes especiales, nos dedicamos a criar gusanos de seda para observar en directo la metamorfosis de estos insectos. 
El lunes 18 de abril llegué a clase con una caja en la que traía unos cuantos gusanos recién nacidos y algunos huevos aún sin eclosionar. A partir de ese momento, a diario nos dedicamos a observar como iban naciendo, creciendo y transformándose. Vimos cómo mudaban su piel, cómo cambiaban, bajábamos a buscar las hojas de morera  que necesitaban para alimentarse y que iban aumentando de tamaño al tiempo que lo hacían nuestros gusanos. No podíamos dejarlos solos el fin de semana, así que los que teníamos permiso los fuimos llevando a casa y fue en uno de esos fines de semana a mediados de mayo, cuando dos de nuestros gusanos formaron el capullo en casa de Olaya Palacio; ¡qué emoción cuando los vimos el lunes por la mañana! A partir de ahí, poco a poco, fueron dejando de comer y formando sus capullos en las esquinas de la caja. Teníamos tantos, que los repartimos en dos cajas para que tuvieran más bordes. Así transcurrió la segunda quincena de mayo, hasta que, por fin, el día 1 de junio cuando llegamos a clase. nos encontramos con la primera mariposa y, al día siguiente, la segunda. Eran dos machos, así que tuvimos que esperar hasta el lunes a que naciera la primera hembra (se diferencian perfectamente, son mucho más grandes que los machos) y entonces pudimos observar cómo, al emitir sus feromonas  la hembra, los machos empezaron a aletear excitados. Uno de ellos, que ya estaba muy cerquita de la hembra, se unió a ella y así los dejamos hasta el día siguiente cuando nos encontramos con un montón de huevos amarillos que la hembra había puesto. Esos huevos amarillitos fueron cambiando de color, lo que indica que han sido fecundados. A partir de ahí el proceso fue similar con el resto de mariposas que iban naciendo, siempre a primera hora de la mañana, antes de que llegáramos a clase. La siguiente sorpresa que tuvimos fue el día 9 de junio cuando, una de las últimas mariposas en romper el capullo, lo hizo estando nosotros ya en clase y pudimos ver en directo cómo salía. 
Ha sido una gran experiencia que podéis seguir en fotos y vídeos en el siguiente montaje. 


1 comentario:

  1. muchas gracias por poner los gusanos de seda, soy Pablo. Me gusto mucho!!!!!!!!!!!

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