El final de este curso se ha visto alterado por el hecho de que tuviera que operarme y lo que tendría que haber pasado el 21 de junio se adelantó al día 2 cuando me sorprendisteis con vuestro regalo.
No hacía falta que me regalarais nada. El hecho de compartir con vosotros dos cursos fue ya un gran regalo. En esos dos años ha pasado de todo, hemos crecido juntos, compartido momentos importantes de vuestras vidas y de la mía y por todo ello os doy las gracias.
Cuando llegue septiembre volveremos a vernos, aunque ya no sea vuestra profe. Nos veremos en los recreos, por los pasillos, en las fiestas... Seguid creciendo como personas y, guardad un rinconín de vuestros corazones para Carmen; en el mío siempre ocuparéis un lugar importante. Os quiero.
